Reseña literaria: The sea of tranquility - Katja Millay

La antigua prodigio del piano Nastya Kashnikov solo quiere dos cosas: terminar el instituto sin que nadie conozca su pasado y conseguir que el chico que se lo arrebató todo- su identidad, su espíritu, sus ganas de vivir - pague por lo que hizo.
La historia de Josh Bennett no es ningún secreto. Cada persona a la que ha amado ha sido arrancada de su vida, y a los diecisiete años no le queda nadie. Ahora lo único que quiere es estar solo. Y parece que la gente comprende que no necesita compañía. Todos excepto Nastya, la misteriosa chica nueva del instituto, que poco a poco irá acercándose a él. Pero cuanto más llega a conocerla Josh, mayor es el enigma. A medida que su relación se intensifica, las preguntas sin respuesta salen a la luz y él comienza a preguntarse si alguna vez sabrá quién es Nastya en realidad, o incluso si quiere descubrirlo.

Título: The sea of tranquility
Autora: Katja Millay
Año de publicación: 2012
Género: Young adult

Este es otro de los libros que me he leído este año en inglés. Es una novela de la que leí unas opiniones maravillosas, y para mi se ha quedado en resultona y ya está.

La novela empieza con Nastya, una chica que se viste de forma provocativa, y tiene una actitud bastante antisocial, ya que no habla con nadie. De hecho, no habla nada. Empieza a asistir a un nuevo instituto, para alejarse de toda su vida anterior, ya que se nos da a entender desde un principio que Nastya ha sufrido un cambio radical, debido a una agresión que sufrió.

En el nuevo instituto, naturalmente, se encuentra con nuevos compañeros, entre los que destacan Josh y Drew. Josh es el otro protagonista de esta historia, un chico que tampoco se relaciona con mucha gente, y que lo ha pasado mal, ya que ha perdido a toda su familia. pero al menos intenta ser educado... El mejor amigo de Josh es Drew, el estereotipo de chico ligón. Drew es el típico secundario que roba el protagonismo XD.

El inicio es muy lento, vemos como los personajes principales viven sus vidas, se observan, se tantean... se van conociendo. Descubrimos los pensamientos y las historias de cada uno, y entonces, cuando sabemos más de ellos, es cuando empiezan a relacionarse, y a entender cada uno las motivaciones de los que hace el otro... de este modo se forja una relación lenta, pero muy bonita. Se visitan el uno al otro, y se van adaptando entre ellos, las visitas al garaje de Josh, y la amistad que se forja entre Nastya y Drew.

Los acontecimientos no se precipitan hasta el final, cuando la protagonista tiene que afrontar sus problemas y solucionarlos, porque no se puede huir de ellos en absoluto, como pretendía Nastya. Y eso es lo que más me disgusta de la novela, no entiendo eso de vivir una situación horrible, y cambiar del todo, alejarte de una familia que está intentando ayudarte, no relacionarte, no buscar ayuda... e intentar buscar una explicación. Me parece una actitud muy poco madura, cuando lo que yo creo que hay que hacer es seguir para adelante como una mejor pueda. Como más o menos va haciendo Josh, aunque tenga también su período de adaptación.

Pero en general es una novela tierna, que habla de superar y asimilar las situaciones que nos han causado sufrimiento en esta vida, no de olvidarlas, porque eso es imposible. Destaco como no solo se centra en las historias de los protagonistas, sino que hay personajes secundarios que tienen sus propias tramas entrelazadas. La mejor es la de Drew, con las comidas de los domingos con su familia, que resultaron ser de lo mejor de toda la novela.

En fin, una lectura agradable, pero poco más. Tal vez se haga un poco lenta.

¿Y vosotros? ¿La habéis leído? ¿Os ha gustado?

UNA OBRA DE ARTE PARA ESTE LIBRO

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